BIENVENIDOS A

BIENVENIDOS A

Los primeros síntomas de la enfermedad de Parkinson pueden aparecer hasta 20 años antes que los trastornos motores

Los investigadores buscan estrategias neuroprotectoras que actúen sobre la muerte neuronal y la evolución de los síntomas . Investigaciones recientes indican que el comienzo de la enfermedad de Parkinson en el cerebro puede preceder más de 10 y hasta 20 años a los trastornos motores --caracterizados por el temblor, la rigidez o la lentitud de movimientos--, con síntomas vagos e inespecíficos como pérdida de olfato, trastornos de conducta durante el sueño, depresión o estreñimiento, según han explicado expertos durante el VIII Seminario Lundbeck de Neurología "Enfermedad de Parkinson. Diagnosticar para prevenir", celebrado en Sitges.
"Hasta hace pocos años, entendíamos que diagnóstico precoz era sinónimo de establecer un diagnóstico lo antes posible tras la aparición de los primeros síntomas motores. Hoy en día, hablamos de diagnóstico precoz como aquél que se establece años antes de que aparezcan los síntomas motores, en la fase premotora de la enfermedad", ha afirmado el director del Centro de Investigación de Parkinson de la Policlínica Gipuzkoa de San Sebastián el doctor Gurutz Linazasoro, para quien el diagnóstico precoz "es el gran reto".
La perdida olfativa y los trastornos durante el sueño sugiere a los investigadores que antes de la aparición clínica de la enfermedad se pierden entre un 50 y 70 por ciento de las neuronas dopaminérgicas. "Si se identifica la enfermedad en esta fase precoz y se consiguen retrasar los síntomas unos años, el número de enfermos se reduciría a la mitad en dos o tres décadas", afirma este experto.
Por este motivo, los expertos abogan por descubrir biomarcadores con los que poder detectar la enfermedad en estadios más tempranos, aunque según explica el Neurólogo especialista en Trastornos del Movimiento del Hospital Ramón y Cajal de Madrid, el doctor Juan Carlos Martínez Castrillo, este ya es "uno de los principales objetivos clínicos en la actualidad".
El desarrollo de actuaciones terapéuticas preventivas efectivas en esos estadios iniciales "silenciosos" o cuando menos mínimamente sintomáticos del mal, es crucial para evitar la aparición de síntomas motores incapacitantes. No obstante, es algo complejo debido a que todavía no existen terapias que detengan la progresión de la enfermedad.
Además, se sabe que no todas las personas con una alteración del olfato o del sueño o con anomalías en las pruebas genéticas o en el DATscan acabarán desarrollando los síntomas motores de la enfermedad de Parkinson. Es más, los datos epidemiológicos indican que serán una minoría.
Por tanto, otra de las prioridades de los expertos es la búsqueda de estrategias neuroprotectoras que actúen sobre la muerte neuronal y la evolución de los síntomas, ya que, aunque numerosos moléculas han mostrado un efecto protector en modelos experimentales en animales, aún no hay resultados concluyentes en pacientes con enfermedad de Parkinson.
Actualmente, existen una serie de fármacos con potencial neuroprotector basados en su mecanismo de acción y en sus efectos en modelos animales además de otras estrategias no farmacológicas, tales como la cirugía o la infusión de factores de crecimiento, que pueden ser interesantes.
Amplia la información visitando www.europapress.es

No hay comentarios: