Personalizando el tratamiento en cáncer de pulmón

La terapia dirigida mejora la supervivencia libre de progresión pero, lo más importante, es que mejora la calidad de vida del paciente

El cáncer de pulmón es una enfermedad que se produce por el crecimiento excesivo de células malignas en el tracto respiratorio, específicamente en el tejido pulmonar. Representa una de las causas de muerte más frecuentes por cáncer en ambos géneros en el mundo entero.

Durante los últimos años, se ha trabajado por conocer cada vez mejor esta patología. Hoy día suele clasificarse en dos tipos, de acuerdo al tamaño y la apariencia de las células malignas. Se distinguen por tanto el cáncer pulmonar de células pequeñas (microcítico) y el de células no pequeñas (no microcítico). Esta distinción resulta fundamental para determinar cuál será el tratamiento que recibirá el paciente.

Cuando se diagnostica a un paciente con un cáncer de pulmón no microcítico es posible ir incluso más allá y conocer aún mejor las características específicas del tumor.  Explica la doctora Enriqueta Felip, directora del Instituto Oncológico Baselga de Barcelona, España, que en algunas oportunidades puede existir en la membrana de las células un receptor denominado EGFR (sus siglas traducidas al español significan receptor del factor de crecimiento epidérmico) el cual, al encontrarse en un estado mutado juega un papel muy importante en la proliferación de las células malignas y, por tanto en el crecimiento del tumor y diseminación del cáncer.

Para saber si el EGFR se encuentra mutado, se necesita tener la muestra de la biopsia del tumor. Sin embargo, un elemento clave para esta fase del diagnóstico es la colaboración del patólogo quien procesará la muestra para determinar en qué estado se encuentra.

“En el caso de que se verifique que sí hay una mutación del gen en el tumor del paciente, sabemos que tiene altas posibilidades de responder a fármacos que funcionan como inhibidores de la tirosinquinasa, explica la Dra. Felip.

“Erlotinib es uno de estos fármacos que, al unirse al receptor, detiene  la señal de transmisión, inhibiéndolo, por lo que todo el proceso de proliferación no se lleva a cabo y no hay crecimiento de las células tumorales.”

Describe la especialista que, más allá de detenerse el proceso de crecimiento del tumor,  incluso es posible hablar de un retroceso de la enfermedad. “Al hablar de erlotinib estamos hablando de un fármaco que no solo estabiliza la enfermedad sino que logra una regresión en un 70 a 80% de los casos”, asevera.

Felip explica que “en pacientes con mutación está claro que hay que dar una terapia dirigida porque mejora la supervivencia libre de progresión, pero lo más importante es que mejora su calidad de vida. Existen pacientes en los que el tumor es muy sintomático y que tienen mucha tos, dolor y dificultad para respirar. Estos son pacientes que mejoran a los seis, siete días de empezar el tratamiento. Así que no es solo que mantengamos la enfermedad controlada sino que obtengamos una mejoría de la sintomatología asociada a la patología”, asegura. Explica que la otra ventaja adicional es que se trata de un fármaco oral que se administra una vez al día y que, al contrario de la quimioterapia, presenta efectos secundarios limitados ya que no se presenta caída del cabello ni baja de defensas.

Terapia personalizada del cáncer de pulmón

La doctora explica que si bien el cáncer de pulmón es una enfermedad que aún representa una alta mortalidad, en los últimos años ha habido importantes avances en la manera de tratarlo y asegura que representa uno de los paradigmas actuales de enfermedades con posibilidad de aplicar tratamientos personalizados.

“Desde mi punto de vista, la mejoría pasa por la individualización. Cada paciente es diferente, por lo que tenemos que hacer una muy buena estadificación, saber exactamente dónde y cómo está la enfermedad”, asegura.  Explica que en la actualidad, cada vez es posible conocer más datos de las características del tumor a través de la colaboración con biólogos y patólogos, lo que hace a este tumor más vulnerable, ya que al conocer los datos de su estructura es posible atacarlo de una forma más eficaz.

Fuente: Conecta Comunicaciones